Anteriormente, no disponíamos de los medios tecnológicos que disponemos hoy en día, en la era digital. Esta era en la que vivimos, está fundamentada en pequeños pasos que a lo largo de la historia hemos ido dando, y en cuanto a programas digitales de edición como por ejemplo Premmiere, Final Cut o Avid; la moviola es en lo que cada uno de esos programas fundamenta su funcionamiento.
La moviola es una máquina que se utiliza a la hora de realizar el montaje. El mecanismo original, inventado en 1917 por Iwan Serrurier, se fundamentaba en un rodillo de entrada y otro de salida por donde discurría la película verticalmente ( a diferencia de otros aparatos que saldrían al mercado posteriormente ), una manivela para activar los engranajes de los rodillos y un visor que permitía ver al manipulador de la manivela ver la película en movimiento para poder seleccionar, cortar y pegar, los trozos de película e ir realizando el montaje. En un principio pensaban darle uso como un proyector de películas.
6 años después de descubrir el invento, se comenzó a comercializar, pero entre el elevado precio que tenía y el desconocimiento de las posibilidades que albergaba, no tuvo el exito esperado hasta que en 1924, conoció a un montador y tras unas pequeñas modificaciones, decidieron cambiar la utilidad del desconocido invento para darle una salida más productiva que la anterior: herramienta de montaje.
El éxito fue rotundo, estudios como Warner Bros, Universal Studios, Buster Keaton Productions, Charles Chaplin Studios y Metro-Goldwyn-Mayer compraron las moviolas.
Con la aparición del cine sonoro en 1927, se tuvieron que añadir otra cabeza a la ya existente dedicada a la imagen, en este caso para el audio, por lo que se hizo indispensable a la hora de realizar los montajes por todo el tema de coherencia en los diálogos.
La empresa creada por Serrurier, Moviola Co, era la encargada de distribuir su creación.
También se realizaron cambios en los visores, utilizando lentes de 16mm, 35mm, 65mm y 70mm, Movitone como lector de sonido, Vitaphones para grabar discos, proyectores sincronizadores...
Otros aparatos de montaje, que surgieron durante los años 30 son la Steenbeck (inventada en la Alemania los años 1930), la KEM (Keller-Elektro-Mechanik, también alemana), la Prévost y la Intercin.
La moviola se utiliza desde los años 20, pero ya en 1903, Edin Porter comenzó la intercalación de planos, en una película que aparecía una casa incendiada y coches de bomberos llegando a ella y realizando las labores de extinción.
Se puede considerar a David Wark Griffith, como el padre del cine moderno, ya que comenzó a utilizar los primeros planos con intenciones psicológicas y emocionales, y fue el primero en realizar flashbacks y acciones paralelas, comenzando a demostrar de lo que podía ser capaz el lenguaje cinematográfico.
Hay distintos tipos de montaje, ya que se puede realizar de una manera disimulada, la académicamente más correcta, porque dicen que el montaje tiene que ser algo invisible.
Por otro lado, se puede realizar un montaje más notorio, aumentando la agresividad de una secuencia, como es el caso de Sergei Eisenstein, que repudiaba el tipo de montaje de Griffith. Este, utilizaba planos consecutivos de corta duración y diferente escala enfatizando un ritmo vertiginoso, que obtuvo su máximo explendor en 1925 con El acorazado Potemkim. Muchas de sus obras fueron utilizadas también con fines propagandísticos del régimen comunista.
Otro tipo de montaje, es precisamente la ausencia de este, como la que se realiza en la corriente danesa del cine dogma, principalmente caracterizada por la ausencia de postproducción, con intención de intensificar el desarrollo dramático. Uno de sus máximos exponentes es Lars Von Trier.
Por último, el cine frances de los años 50, más conocido como la Nouvelle Vague, con sus máximos representantes como François Truffaut y Jean-Luc Godard, rompían las normas de la lógica que hasta entonces existía, llegando incluso hasta no respetar las normas de los eje. La razón fundamental es que los montadores eran críticos de cine realizando dicha labor.
El cine, en determinadas épocas también se ha utilizado con fines propagandísticos básados en la manipulación a través del montaje, como en la Segunda Guerra Mundial y el caso tan significativo como vergonzoso de "El triunfo de la voluntad" dirigida por Leni Reifenstahl en 1934, en la que la propaganda nazi se realiza de una manera muy explícita, mostrando discursos y desfiles bajo el lema: "hecha por nazis, para nazis y sobre nazis".
A diferencia del productor o del director, el montador, no ve como se va gestando la película, por lo que él, cuando realiza el visionado de la película, lo hace como público teniendo un punto de vista más objetivo, en el que no tiene lugar el esfuerzo o presupuesto a la hora de haber conseguido una escena.
Hay 2 elementos fundamentales que se tienen que tener en cuenta a la hora del montaje:
- La dirección de las miradas, dirigiendo el eje de la acción.
- Triming: es el momento, el frame justos en el que se debe realizar un cambio de plano que el movimiento que se genera juntando ambos planos, sea lo más fluido y natural posible. 2 frames de más o de menos, puede marcar la diferencia entre una situación normal, o una situación angustiosa.
Para concluir, y conocer el poder de influencia que tiene el montaje, uno de los mejores ejemplos es el efecto Kuleshov, mediante el cual, se pretende infundir diferente fuerza emocional a un único primer plano inexpresivo de un actor, según el contenido de los planos que le yuxtaponía. La expresión del actor era la misma, pero transmitia distintos sentimientos se se trataba de un plato de sopa, de un cadaver o de un bebe. Transmitiendo en cada uno, hambre, lástima o ternura, respectivamente.